HIIT

 

 

El HIIT (High Intensity Interval Training) o Entrenamiento Interválico de Alta Intensidad es un sistema de entrenamiento basado en la combinación de intervalos anaeróbicos (alta intensidad) y aeróbicos (moderada intensidad).

Las sesiones comenzarán con un calentamiento seguido de un HIIT, y terminarán con 30 minutos de ejercicio aeróbico suave para optimizar la pérdida de grasa. Aunque con el HIIT es suficiente para lograr mejoras significativas por si solo, añadir cardio moderado después de éste, ayuda a quemar más grasa aún.

Este tipo de entrenamientos han demostrado en múltiples estudios (estudio) ser más eficientes en la pérdida de grasa y con menor riesgo de pérdida de músculo que con el ejercicio aeróbico continuo y moderado, pero lo más importante es que con este tipo de entrenamiento en muy pocas semanas se pueden conseguir progresos importantes a nivel de salud, como una mejora significativa del control de la glucosa y función muscular (biogénesis mitocondrial y aumento del GLUT4). 

 

También ha demostrado ser más eficaz para la mejora de la potencia aeróbica y el VO2max o consumo máximo de oxígeno (uno de los mejores marcadores predictivos de salud, especialmente en prevención de enfermedades cardiovasculares), aumento y mejora de la capacidad oxidativa (quema de grasa) y el control metabólico del músculo, aumento de la sensibilidad a la insulina (los tejidos musculares serán más receptivos a la entrada y al uso de la glucosa en sangre, en lugar de acumularse en forma de grasa), mejora del rendimiento, etc.

Además, se ha visto que es más efectivo para mejorar la función vascular y, en mayor medida, la salud cardiorrespiratoria y metabólica, previniendo patologías relacionadas como la obesidad, la diabetes tipo II o las enfermedades cardiovasculares. 

Hay que tener en cuenta que para realizarlo de forma segura hay que empezar de forma gradual y progresiva realizando en las primeras sesiones intervalos de moderada intensidad hasta llegar a los de alta intensidad, también es aconsejable que antes de empezar a entrenar con intensidades altas, realizarse una prueba de esfuerzo para saber si estamos preparados para ello. El HIIT de una persona obesa que empieza a entrenar será muy diferente al de un deportista de alto rendimiento.